Enamorando a Jaehee [Parte 1]

"La Fuerza Silenciosa"

Jaehee Kang era todo lo que yo no había esperado encontrar en esta historia. Seria, tranquila, siempre tan profesional. Al principio, la veía como la mujer perfecta para Jumin, alguien que era su opuesto en muchos aspectos, pero complementaria a la vez. En sus primeros mensajes, era fácil ver que su vida estaba llena de responsabilidades, y muchas veces me sentí casi como una distracción para ella, un pequeño escape entre tantas tareas. Sin embargo, había algo en su calma que me atraía. Esa serenidad que parecía capaz de calmar cualquier tormenta, era como un refugio.

Un día, me escribió sobre lo agotada que estaba después de un largo día de trabajo, y sentí la necesidad de responderle de una manera diferente. “𝘑𝘢𝘦𝘩𝘦𝘦, ¿𝘢𝘭𝘨𝘶𝘯𝘢 𝘷𝘦𝘻 𝘵𝘦 𝘩𝘢𝘴 𝘱𝘦𝘳𝘮𝘪𝘵𝘪𝘥𝘰 𝘥𝘦𝘴𝘤𝘢𝘯𝘴𝘢𝘳 𝘳𝘦𝘢𝘭𝘮𝘦𝘯𝘵𝘦? 𝘕𝘰 𝘵𝘰𝘥𝘰 𝘦𝘯 𝘭𝘢 𝘷𝘪𝘥𝘢 𝘦𝘴 𝘵𝘳𝘢𝘣𝘢𝘫𝘰. 𝘛𝘪𝘦𝘯𝘦𝘴 𝘲𝘶𝘦 𝘤𝘶𝘪𝘥𝘢𝘳 𝘥𝘦 𝘵𝘪 𝘮𝘪𝘴𝘮𝘢 𝘵𝘢𝘮𝘣𝘪𝘦́𝘯.”

Me sorprendió lo fácil que fue abrir la puerta para que ella hablara de sus miedos, de las presiones que enfrentaba trabajando para Jumin. Ella me reveló que, aunque apreciaba mucho su trabajo, sentía que había perdido parte de sí misma en el proceso. “𝘈 𝘷𝘦𝘤𝘦𝘴 𝘮𝘦 𝘱𝘳𝘦𝘨𝘶𝘯𝘵𝘰 𝘴𝘪 𝘱𝘶𝘦𝘥𝘰 𝘩𝘢𝘤𝘦𝘳 𝘢𝘭𝘨𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘮𝘦 𝘩𝘢𝘨𝘢 𝘧𝘦𝘭𝘪𝘻. 𝘈𝘭𝘨𝘰 𝘴𝘰𝘭𝘰 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘮𝘪́. 𝘗𝘦𝘳𝘰 𝘱𝘢𝘳𝘦𝘤𝘦 𝘵𝘢𝘯 𝘥𝘪𝘧𝘪́𝘤𝘪𝘭…”

No sabía cómo ayudarla exactamente, pero de alguna manera, me sentí conectada con ella de una forma que nunca había anticipado. “𝘓𝘢 𝘧𝘦𝘭𝘪𝘤𝘪𝘥𝘢𝘥 𝘱𝘶𝘦𝘥𝘦 𝘴𝘦𝘳 𝘢𝘭𝘨𝘰 𝘱𝘦𝘲𝘶𝘦𝘯̃𝘰, 𝘑𝘢𝘦𝘩𝘦𝘦. 𝘕𝘰 𝘴𝘪𝘦𝘮𝘱𝘳𝘦 𝘵𝘪𝘦𝘯𝘦 𝘲𝘶𝘦 𝘴𝘦𝘳 𝘶𝘯 𝘨𝘳𝘢𝘯 𝘤𝘢𝘮𝘣𝘪𝘰. 𝘛𝘢𝘭 𝘷𝘦𝘻 𝘴𝘰𝘭𝘰 𝘯𝘦𝘤𝘦𝘴𝘪𝘵𝘦𝘴 𝘵𝘪𝘦𝘮𝘱𝘰 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘵𝘪 𝘮𝘪𝘴𝘮𝘢, 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘩𝘢𝘤𝘦𝘳 𝘭𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘦 𝘩𝘢𝘤𝘦 𝘴𝘰𝘯𝘳𝘦𝘪́𝘳.”

A partir de ahí, nuestras conversaciones fueron un respiro entre sus largos días laborales. A veces hablábamos de libros, otras de música, pero siempre había un toque de vulnerabilidad que no había visto en ella antes. Poco a poco, comencé a ver más allá de su profesionalismo: Jaehee tenía sueños, deseos, y una belleza interna que la hacía brillar, incluso en su silencio.

Una tarde, mientras me contaba sobre un proyecto que estaba terminando, su voz sonó diferente. Estaba más relajada, casi como si se hubiera dejado llevar por la conversación. “𝘔𝘊, 𝘨𝘳𝘢𝘤𝘪𝘢𝘴 𝘱𝘰𝘳 𝘦𝘴𝘤𝘶𝘤𝘩𝘢𝘳𝘮𝘦 𝘴𝘪𝘦𝘮𝘱𝘳𝘦. 𝘕𝘶𝘯𝘤𝘢 𝘱𝘦𝘯𝘴𝘦́ 𝘲𝘶𝘦 𝘯𝘦𝘤𝘦𝘴𝘪𝘵𝘢𝘳𝘪́𝘢 𝘢 𝘢𝘭𝘨𝘶𝘪𝘦𝘯 𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘵𝘶́ 𝘦𝘯 𝘮𝘪 𝘷𝘪𝘥𝘢. 𝘗𝘦𝘳𝘰 𝘢𝘩𝘰𝘳𝘢 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘦 𝘵𝘦𝘯𝘨𝘰… 𝘮𝘦 𝘥𝘰𝘺 𝘤𝘶𝘦𝘯𝘵𝘢 𝘥𝘦 𝘭𝘰 𝘪𝘮𝘱𝘰𝘳𝘵𝘢𝘯𝘵𝘦 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘴 𝘵𝘦𝘯𝘦𝘳 𝘶𝘯 𝘳𝘦𝘴𝘱𝘪𝘳𝘰, 𝘪𝘯𝘤𝘭𝘶𝘴𝘰 𝘦𝘯 𝘮𝘦𝘥𝘪𝘰 𝘥𝘦 𝘵𝘰𝘥𝘰.”

Mi corazón se aceleró, y mi respuesta salió espontáneamente. “𝘚𝘪𝘦𝘮𝘱𝘳𝘦 𝘦𝘴𝘵𝘢𝘳𝘦́ 𝘢𝘲𝘶𝘪́ 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘵𝘪, 𝘑𝘢𝘦𝘩𝘦𝘦. 𝘛𝘦 𝘮𝘦𝘳𝘦𝘤𝘦𝘴 𝘵𝘰𝘥𝘰 𝘭𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘦 𝘩𝘢𝘨𝘢 𝘧𝘦𝘭𝘪𝘻.”

Y así, entre risas suaves y silencios cómplices, fui descubriendo una faceta de ella que me enamoraba cada vez más. Jaehee no era solo la mujer perfecta para Jumin. Era una mujer perfecta para mí también, con una fortaleza silenciosa que me cautivaba y una ternura que solo mostraba cuando estaba con quien confiaba.

Quizás, al final, la verdadera pregunta era: ¿cómo podría estar con alguien que reflejaba todo lo que yo anhelaba ser, y al mismo tiempo me mostraba el amor que nunca supe que necesitaba?